El Instituto Aragonés de Fomento (IAF), entidad dependiente del Gobierno de Aragón y cuya finalidad es el impulso de la competitividad de la empresa en la CCAA de Aragón, a través de su Programa ARAGÓN EMPRESA y tras un proceso de evaluación y control, ha concedido a Weee International Recycling, S.L. el sello RSA que avala el compromiso de la Compañía con la Responsabilidad Social Corporativa.
El IAF, mediante la articulación de su protocolo de actuación, ha contribuido a que la planta de tratamiento de residuos eléctricos y electrónicos – RAEE – situada en Villanueva de Gállego, conozca, asimile e implante las mejores herramientas en materia de gestión empresarial, lo que supone también un impulso en su transformación y posicionamiento como referente a nivel nacional como plataforma de promoción de la Economía Circular.
Al listado de certificaciones de calidad que atesoran los procesos de Weee International Recycling, S.L., entre los que se incluyen el reconocimiento de ámbito europeo en el campo de la Excelencia en el Tratamiento de Residuos Eléctricos y Electrónicos, se une ahora esta nueva acreditación que, partiendo de la confirmación que en el ejercicio de su actividad se está al corriente tanto de las obligaciones con Hacienda como con la Seguridad Social además de no encontrarse en ninguno de los supuestos de prohibición para contratar con las Administraciones Públicas y/o recibir subvenciones de las mismas, avala el firme compromiso de la Compañía en Principios tales como la transparencia, la sostenibilidad, el respeto a las personas empleadas, la excelencia en la gestión y orientación al cliente, la relación con los proveedores y el respeto al Medio Ambiente, todos ellos considerados pilares básicos del Plan de Responsabilidad Social de Aragón.
Dando continuidad al código deontológico y de valores que preside el Grupo VAREC (del que Weee International Recycling, S.L. forma parte), el convertirse en una organización ejemplar en el ejercicio de su actividad, trasciende a lo que ya de por sí representa y supone tal distinción, para convertirse en un objetivo en sí mismo considerado, de tal manera que el desarrollo de las distintas líneas de negocio sea siempre bajo el cumplimiento de la legislación vigente y contribuir así a la mejora del bienestar social desde el reciclaje y valorización de los recursos eléctricos y electrónicos.